¿Habéis visto en alguna ocasión una tortilla de patatas cúbica? ¿O lo que viene a ser una tortilla de patatas invertida? Yo tampoco hasta que descubrí la receta que desde allá por el año 2002 sirve Koldo Rodero en su restaurante en Pamplona. Fijate que no hace años.
Pues bien, aprovechando que tengo unas patatas de una calidad soberbia, de la variedad monalisa, ideal para freír, que muy amablemente me hicieron llegar los chicos de Frusangar, aquí os la traigo. Es impactante, especialmente cuando la cortas, pero desde luego muy sencilla de preparar, no tienes mas que seguir los pasos meticulosamente. Así que si la servís en una de esas comidas especiales, como aperitivo, sorprenderéis y de que manera¡¡¡.
Esta tortilla de patata no lleva cebolla, pero eso si, va servida sobre una cama de natillas de cebolla que quitan el hipo, y que además es una receta que os pueden servir de acompañamiento de otros platos.
Si, si...ya se que hay personal que no le gusta la cebolla en la tortilla de patata, para gustos los colores, claro. Pero yo es que no concibo una tortilla de patatas sin su cebollita.... Le aporta no solo el sabor y el punto dulce, sino una jugosidad absolutamente necesaria en este plato.
Y me diréis ¿pero donde está la tortilla? Pues muy sencillo, básicamente se trata de una tortilla de patata invertida. En lugar de que el huevo envuelva la patata, aquí la patata envuelve el huevo. Por fuera patata frita en su punto, cremosa pero con pequeño toque crujiente. En su interior esconde yema de huevo trufado poco hecho, y en la base una cama de natillas de cebolla. Al cortar ese cubo de patata, la yema de huevo trufado escapa, mezclándose con la natilla de cebolla...... Cucharilla en mano, pescamos trocito de patata y yema de huevo con natillas de cebolla. Está para hacerte saltar de la silla. No os digo mas.
Eso si, si sois de los que no les va el huevo poco hecho, quizá esta tortilla no sea para vosotros. Aunque lo digo con la boca pequeña. Yo soy de esas, y sin embargo esta tortilla con una buena patata, me ha encantado. La yema se une con la natilla de cebolla y notas su sabor, pero no te da la sensación de que la yema está prácticamente líquida.
El espectáculo es cuando rompes la patata, aparece allí toda la yema semicremosa (está montada), y escapa, mezclándose con la natilla de cebolla.... Además el personal quedará verdaderamente sorprendido.... no podrá explicarse como has podido introducir ese huevo en el interior de la patata frita¡¡¡¡ No les contéis el secreto, dejadles con la incógnita...
En esta ocasión, lo siento cuando rompí la patata, hice el corte en la patata tan hasta abajo, que la yema escapó tan rápido que no llegó a la foto. Es lo que tiene ser a la vez, cocinera y fotógrafa sin ayudas.
Os comentaba que las patatas que he utilizado para estas tortillas de patatas, me las habían enviado desde Frusangar, que es una empresa familiar dedicada a la comercialización de la patata, pero con una experiencia de 30 años a sus espaldas. Desde luego el producto es de calidad, os lo puedo asegurar, y ya sabéis que yo no soy de hablar por hablar. El primer día que llegaron las patatas a casa preparé una tortilla de patatas tradicional espectacular. Eso si, la variedad de las patatas ayuda, en concreto estas que utilizo son de la variedad Monalisa especiales para freír, y se nota. Una pena que en España, no se acostumbre a identificar la variedad del tubérculo cuando compramos, porque eso nos ayudaría especialmente para decidir que variedad de patata es conveniente en cada caso.
Vamos con la receta, que a pesar de lo que pueda parecer es sencilla, y sale, si como os digo seguís los pasos de forma meticulosa:
INGREDIENTES:
Para la Tortilla de Patatas Cúbica: (Para 3 raciones)
- 3 Patatas grandes variedad "Monalisa" bien grandes.
- 6 yemas de huevo.
- 5 gr. de trufa o aceite de trufa si os resulta mas fácil.
- Sal
Para la natilla de cebolla:
- 1 cebolla bien hermosa de calidad.
- 25 gr. de cebolla deshidratada.
- 50 ml de nata para cocinar.
- 150 ml de leche entera.
- 1 yema de huevo.
- Sal y pimienta.
Aceite de oliva para freír las patatas.
PREPARACIÓN:
Comenzamos preparando las natillas de cebolla:
En una cazuela ancha y baja, ponemos un cucharada de aceite de oliva y pochamos la cebolla que previamente habremos cortado en trocitos muy pequeños.
Cuando la cebolla esté pochada pero con cierto color dorado, añadimos la nata y la leche, mezclamos bien. Y ahora la cebolla deshidratada, que potenciará aun mas el sabor de la cebolla.
Dejamos cocer la mezcla a fuego bajo unos 10 minutos, mientras infusiona.
Una vez infusionada, y fuera del fuego añadimos la yema y la mezclamos con el resto rápidamente.
Trituramos la mezcla y pasamos por el colador. En mi caso y como me gustaba la textura un tanto mas gruesa que quedó, me salté este paso.
Vamos ahora con nuestra tortilla de patatas invertida:
Pelamos cada patata y la cuadramos en un cubo de unos 8 x 6 cm.
Cortamos una de las caras mas estrecha que nos hará de falsa cara.
Vaciamos con un sacabolas su interior, lo mas posible pero cuidando de no romper ni la base, ni los laterales.
Ponemos un cazo altito con bastante aceite de oliva. El aceite tiene que cubrir la patata. Y freímos 3-4 minutos a 130-135ºC.
Sacamos la patata y la tapa del aceite y depositamos sobre papel absorbente. Seguimos así con todas las patatas restantes
Precalentamos el horno a 180ºC.
Montamos las yemas. Es importante este paso, pues como la yema de huevo va a quedar bastante cruda, es importante que al salir tenga una textura mas de tipo mousse, al menos para mi gusto. Añadimos la trufa rallada, que le dará un sabor y un aroma espectacular. Salpimentamos.
Vamos ahora con la segunda fritura. Volvemos a introducir cada patata con su tapa de nuevo en el aceite, en esta ocasión a 165ºC, y le damos otra fritura de 3 minutos. Sacamos sobre papel absorbente y dejamos que escurra.
Esta doble fritura nos servirá para que las patatas se encuentren cocinada y cremosa por dentro, pero cierto color y con un toque mas crujiente por fuera.
Rellenamos cada patatas con la yema trufada y con un poco de huevo sellamos y colocamos la tapa.
Llevamos al horno 2-3 minutos a 180ºC, para sellar ese encuentro.
Servimos sobre una cama de natillas de cebolla, y colocamos la patata, con la tapa hacia abajo, de forma que resulte invisible al ojo,
Añadimos unas escamas de flor de sal y a la mesa.
Ya allí les hacemos cortar la patata y verán como de su interior sale esa yema cremosa trufada. En el cielo.
A disfrutar.
VIRGINIA.
Original y espectacular, Virginia. De esta receta me gusta todo. Como a ti, no concibo una tortilla de patatas sin mmmuuucchhaaa cebolla, me gusta el sabor que le da.
ResponderEliminarLa salsa que has hecho, creo que además es muy aprovechable en muchos platos. De la manera como presentas la patata y el secreto que encierra.....no tengo palabras!! Una verdadera maravilla.
Besos
Virginia, me parece una super receta, me encanta porque obvias las claras a las que no tengo ningún afecto, jajaj, excelente presentación,bss
ResponderEliminarTiene que ser el cielo!!! madre mia! Vaya recetón! de estrella Michelin (supongo que no habrás tenido agravios comparativos esta vez!!!!jajaja).
ResponderEliminarMe ha encantado...a mi si me gusta en huevo más bien húmedo en una tortilla de patata Y CEBOLLA, así que esta receta me parece un paso más, un escalón en el mundo de las tortillas...
Me ha encantado y las fotos como siempre, divinas.
Buena semana!
Espectacular, no tengo otra palabra para describirlo. Me ha dejado boquiabierta la presentación y el conjunto del plato con esa variedad de sabores entremezclándose. Enhorabuena. Besos!
ResponderEliminarAna
Absolutamente espectacular y perfecto para compartir un momento de alta cocina en casa!!!
ResponderEliminarLa yema escapándose de la patata en su punto tiene que ser una maravilla... Idea apuntada para muy pronto!!!!
Besos y feliz semana,
Palmira
Yo también soy de la tortilla con cebolla, me encanta no la concibo de otra manera. Ahora bien, esta me parece espectacular, las natillas se me hace la boca agua y la elaboración de la patata con el huevo es muy interesante, la verdad? me quito el sombrero, es perfecta aunque sea deconstruida.
ResponderEliminarUn beso, guapa, feliz semana.
Qué espectáculo!! un poco entretenida de hacer pero a los que nos gusta sorprender en la cocina el resultado es soberbio y merece la pena... por supuesto que la tortilla sin cebolla es como un jardín sin flores que le falta alegria y gracia. Un besazo!!
ResponderEliminarBueno ... de verdad ... tenías que estar viéndome mientras te leía, mientras leía tu explicación sobre la tortilla deconstruida, de verdad que mi cara era un poema, me imaginaba el huevo chorreando por esa patata cúbica, y me daban ganas de lamer la pantalla, dios que delicia. Me encantan las tortillas poco hechas, y me encantan las tortillas con cebolla. ¿Natillas de cebolla? Eres INCREIBLE, pedazo plato te has preparado, siii, los invitados se quedarían estupefactos al ver el plato, pero más estupefactos al comprobar lo delicioso que tiene que ser, además con ese toque de trufa, vamos que para mí LO HAS BORDADO !!!!
ResponderEliminarBesos y feliz semana
Genial! desde que ví la foto me preguntaba COMO la habrías hecho!!! me encanta, te ha quedado muy muy bien, y no te preocupes por la foto de la yema, nos la imaginamos perfectamente. Yo soy de las de tortilla de patatas con cebolla así que.... en tu plato no me falta ningún ingrediente!!!
ResponderEliminarUy todo lo que se me está pasando por la cabeza para las natillas de cebolla, pero incluso para rellenar la patata. Con lo que me gustan a mi estos líos, me ha encantado. Un besazo guapa.
ResponderEliminarMonie >_<
Eres genial, tienes un dominio en la cocina que es un gusto y lo completas con una elegancia en la presentación y una calidad de la fotografía increíble. Un abrazo y feliz semana, Clara.
ResponderEliminarMe gusta ese toque original y creativo! Me gusta!
ResponderEliminarSuper espectacular y original, de revista!!! me encanta.
ResponderEliminarBesos y feliz semana
Ettore
una buena combinacion del plato en su conjunto y ese momento magico de romper el cubo de patata y salir la yema trufada no tiene precio,sublime¡¡
ResponderEliminarBuena semana
Bss
Si hay algo que me apasiona es la tortilla de patata con trufa. La he hecho de varias formas diferentes, bastante originales, pero esta les gana a todas, me encanta!
ResponderEliminarYa tengo receta para mi próxima cena en casa,
beso
Noelia
Wow !!!! Enhorabuena espectacular, uno de esos platos maravillosos, y que cuando lees la explicación hasta parece fácil. Coincido contigo en que una tortilla sin cebolla, no es tortilla de patata, así que estas natillas de cebolla es el complemento perfecto.
ResponderEliminarPor cierto, habría que reivindicar que la patata sea considerada un ingrediente importante, y se etiqueten sus denominaciones y orígenes, como se hace con otros alimentos.
Como me pasa casi siempre, he disfrutado con tu receta, el reportaje fotográfico y tus explicaciones.
Besos
Virginia, esto es un lujo de receta. Me encanta la tortilla de patatas y no me canso de probarla en la forma que sea. Me parece que esa cama de natillas de cebolla debe complementarla perfectamente y seguro que es deliciosa. Una receta a tener en cuenta y que si puedo, elaboraré!
ResponderEliminarQué maravilloso plato. Me encantaría probarlo. Una muestra más de que la cratividad y la imaginación en la cocina no está reñida con el sabor y el disfrute...Cien por cien apetecible, enhorabuena!!!
ResponderEliminarSencillamente espectacular y la manera más original que he visto de servir la tortilla de patatas. Desde luego es para dejar con la boca abierta a los comensales. Me quito el sombrero. Besos.
ResponderEliminarTotalmente a-lu-ci-nan-te, Virginia. Ni por asomo me podía imaginar en qué consistiría esta tortilla de patata cúbica y ha sido toda una sorpresa. Según ibas describiéndola, estaba desesando ver el corte y cómo el interior de la patata se fundía con la patata y esas natillas de cebolla.
ResponderEliminarCreo que con tantas alabanzas como habrás recibido hoy, habrás engordado por lo menos cinco kilos, je je je.
Menudo cerebrito que está hecha esta Virginia.
:))
Bsos y feliz semana.
Mira después de hacer la mía liquida va a venir esta!. me parece un plato que queda genial, lleno de sabor y con una presentación diferente. Eso de romper el cubo y que salga la yema me parece un puntazo de los que me gustan. Besotes guapa!!!
ResponderEliminarVaya LUJAZO de receta y según te he leído no parece tan difícil, es decir allá voy y como no tener unos ingredientes de calidad las patatas que sean buenas pero los huevos también.
ResponderEliminarBesos
Espectacular este plato y esta clase magistral de alta cocina. Me encanta conocer estos secretillos. Gracias guapa. Un abrazo.
ResponderEliminarbesosdecanelaymenta
Esto son palabras mayores!!! terriblemente delicioso y que presentacion!!!
ResponderEliminarBss
Puedo decir que esta receta me ha robado el corazón!! Ya la había visto no sé donde, pero ahora con tu receta ya la tengo localizada. Apuntada para algún día de estos que te quieres lucir en la mesa...gracias...mil gracias guapa!!!!
ResponderEliminarGemma de Food&Cakes by GB
Vaya invento Virginia! Aparte de lo original me ha encantado el toque de trufa con el huevo y la patata que ya estoy tardando en probarlo! Besos
ResponderEliminarTienes razón, esta tortilla es espectacular!!
ResponderEliminarTuve la suerte, hace muchos años, bueno.... exactamente 10, de disfrutarla gracias a Koldo Rodero en su fantástico restaurante.
Besos
María
que auténtica pasada! de alta cocina, eh?
ResponderEliminaruna idea fantástica y te quedó ideal!
Virginia, me gusta esperar a dejarte un comentario cuando puedo estar más tranquila (niños dormidos, etc) y volver a leer con calma la receta y ver las fotos. A ver, por dónde empiezo: cebolla en la tortilla...SÍ; huevo poco hecho...SÍ; esta tortilla en particular... ¡me encanta!! La foto del cubo de patata cortado en dos, viéndose el fondo al trasluz, ¡impresionante!
ResponderEliminarUn besito,
Marta ("Sweet & Home la Vida es Dulce")
Vir, ¿te he dicho antes que eres una artista? Querida amiga, esta tortilla "cúbica" es expectacular!!! Y esas fotos? y la explicación... y sobre todo, como lo explicas... Increible!!! Empiezo a darte "empujes" para que te pongas a pensar en publicar un libro de cocina... Estoy segura de que todos los seguidores de tu blog están de acuerdo conmigo!! Así que ya puedes empezar a pensar en tus mejores recetas para publicarlas... Será todo un bestseller!!!
ResponderEliminarBesss!!!
Nunca he preparado una tortilla de patatas, y estoy segura de que si me pongo, me puede salir cualquier forma innovadora, fijo fijo, pero cúbica, perfecta, y apetecible, eso estoy convencida de que no, jajajaja
ResponderEliminarEso sí, se me ha hecho la boca agua leyendo la descripción de tu tortilla, ¡¡¡en serio, hoy no hacían falta mi fotos!!! :P
Es que encima yo soy una amante del huevo casi crudo, si de pequeña le pedía a mi madre que me dejara la tortilla a medio hacer. Pobre mujer, hacía 3 tortillas de patata distintas y éramos 3 en casa xD
De todos modos, y aunque no sé si me atrevo con la receta, se me antoja más sencilla (para mi torpeza) que la normal, porque al menos no hay que dar la vuelta, y el huevo no va fuera xD
Se la voy a enseñar a mi novio, a ver si se atreve a prepararla conmigo (o por mí).
Un beso, maestrilla!!! :P
PD: Es que además la mezcla de huevo y trufa, ¡me mata!
Qué maravilla! Con lo que me gusta la tortilla de patata, esta receta lo tengo que probar si o si! Un saludo :)
ResponderEliminarsimplemente genial!!! gracias por compartir esta receta,
ResponderEliminarY no te preocupes las imágenes son estupendas, recibe mi aplauso
Saludos
Bueno bueno, qué receta más avanzada, Virginia! No sé si la haría, la verdad, pero las fotos son preciosas y la forma cúbica de la tortilla, perfecta :)
ResponderEliminarBesos.
Impresionante Virginia esta tortilla, nos parece de lo más original! y la salsa tiene que estar de lujo.
ResponderEliminarNos ha encantado,
un abrazo
Wow Virginia, me dejas sin palabras! Creo que lo que tenemos que hacer cuando nos veamos es planear dónde pones el restaurante!! Qué maravilla de plato y muy bien explicada la técnica, es de los de impresionar al personal la verdad...una artista!!
ResponderEliminarUn beso
Vir, me dejas sin palabras y mira que eso cuesta eh! Estoy volviendo el alma al cuerpo, porque se me ha escapado justo a esa natilla de cebolla, que divina, que luz más hermosa se filtra, y que subidón de adrenalina gustativa me has dado...me en-can-tas!!
ResponderEliminarChapeau!
Besos bonita.
He visto, leído, y oido hablar de esta tortilla mogollón y nunca me he lanzado a prepararla. Te ha quedado espectacular!! El punto de las natillas de cebolla, le tiene que dar un punto de muerte. Las fotos, además, dan ganas de meterse en la pantalla y ponerte a devorar el plato.
ResponderEliminarOlé! por este plato! un abrazo
Una deconstrucción en toda regla. No puede estar mejor explicado, una receta delicada, original y sabrosa..., yo soy de las que le gusta la tortilla poco hecha, así que me parece perfecta. Unas fotos muy chulas. Besos!
ResponderEliminardsfggg
ResponderEliminarAiiiii... que he salivado tanto viendo ese experimento gourmet que no sé ni qué he dado a enviar. Se me ha quedado la boca abierta y el dedo tonto mientras leía semejante receta. Es realmente de las de sorprender, sorprender. Enhorabuena, guapa! estás que lo bordas.
ResponderEliminarUna maravilla!!! Me has dejado sin palabras, original, bien presentada y seguro que de un sabor delicioso. A mí me habría dado pena empezar a comerla, pero claro no me habría perdido esa rotura con huevo chorreante por nada del mundo.
ResponderEliminarBss
Elena
Bueno, como colaboradores en la receta, ENHORABUENA! es fantástica en idea y ejecución. Un placer leerte siempre Virginia!
ResponderEliminarQuina truita amb més glamour!!! Espectacular!!! Petonets!
ResponderEliminarImpresionante!!! y delicosamente apetecible...
ResponderEliminarUn beso
Paloma
Como te lo podria decir para que no se notara mi envidia? No lo sé, pero es enorme. Haces con los platos lo que quieres y lo dominas todo con un precisión que resulta fantástica. No continuo, seria más de lo mismo...
ResponderEliminarNani
Esto es increíble, y un trabajo de locos Virginia! Te felicito desde lo más profundo de mi corazón cocinero,jaja! Lo que me gustaría probarla ni te explico. Y la frase 'que saca el hipo' me encantó!
ResponderEliminarVoy leyendo tu receta y se me va cayendo la "babita". ¡Cuanta sofisticación!
ResponderEliminarMe tienes alucinada. Cómo bien dices, esta receta seguramente hará saltar de la silla a más de uno. A mí me hace dar saltos mortales.
Buenísimas.
Muy buena, la hice ayer! Os dejo el link de Koldo...http://youtu.be/qLtRjf2GVjk
ResponderEliminarMuy buena, la hice ayer! Os dejo el link de Koldo...http://youtu.be/qLtRjf2GVjk
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