Como todos los meses estamos de vuelta con la propuesta mensual de Bake The World. En esta ocasión viajamos a mi amada India y lo hacemos de la mano de uno de mis panes planos preferidos el Pan Naan.
El pan Naan es un pan plano consumido en todo el Medio Este Asiático y se cree que de origen Iraní. De hecho en India, Bangladesh y Pakistan se conoce como pan Naan a los panes planos preparados con sus recetas tradicionales. No obstante al pan naan se le conoce principalmente como un pan que tradicionalmente acompaña las comidas en India, junto al Chapati y el Roti.
Se trata de un pan plano preparado con harina de trigo, que se cuece en hornos Tandoor, situados en el suelo, lo que le permite adoptar la forma alargada de huella de pie en contraposición al Chapati que se cuece en placas y adopta forma redonda. Antes que con agua, este pan se prepara habitualmente con leche o yogurt, ingrediente este último tan consumido en India para refrescar el paladar de las especias picantes que utilizan, recordad el lassi de mango. La incorporación del yogurt con sus fermentos lácticos, le concede una suavidad extraordinaria. Para su fermentación se utiliza levadura o masa vieja de una hornada anterior, aunque también está siendo utilizado en menor medida el gasificante. Generalmente se barniza con ghee (mantequilla clarificada) y se suele espolvorear de semillas u otras especies.
Se suele utilizar para comer a modo de cuchara, envolviendo otros alimentos, pues ya sabéis que los Indios tradicionales, solo utilizan para comer la mano derecha, ya que la mano izquierda es considerada la mano "sucia". Este pan una vez horneado es conveniente conservarlo cubierto con un trapo, para conservar el calor, y os recomiendo comerlo recién hecho o aun tibio, porque pierde con el tiempo, aunque no tanto como otros panes planos, debido principalmente a la humedad que le aporta el yogurt.
En nuestro caso y a falta de horno Tandoor, lo hemos cocinado sobre la piedra de pan, bien precalentada, pues es lo que mas se puede asemejar al calor que alcanza un horno tandoor, aunque según se cuentan, hay una gran diferencia entre un pan naan preparado en horno tandoor y los preparados en hornos convencionales. A falta de piedra de horno os recomiendo cocerlos directamente sobre la base del horno precalentada.
Este pan es muy sencillo y rápido de preparar y en casa gusta a rabiar. Lo hemos comido de distintas formas, pero una de la que mas nos gusta es preparado con leche de coco, y versionando básicamente una receta de Pepekitchen, que es la que hoy os traemos. Tiene un punto muy ligeramente dulce, pero no es realmente dulce, para aquellos que estéis reticentes en la utilización del coco. La incorporación de coco rallado le da el punto crujiente al exterior, conservando la suavidad interior, aunque sin el añadido de coco rallado, que es como lo preparamos habitualmente en casa, resulta aun un pan mucho mas suave. De todas formas ha desaparecido casi de inmediato.
Este pan naan lo hemos acompañado en esta ocasión de una salsa tambien India, la salsa de Raita, a base de yogurt y mostaza, que tradicionalmente se prepara con pepino, y que habitualmente se utiliza como condimento para mojar otros alimentos, aunque también se suele servir como ensalada o entrante de otros platos. Sirve para refrescar el paladar de los condimentos picantes que acompañan tradicionalmente la comida India, de hecho tanto el yogurt como la mostaza se utilizan con estos fines.
En esta ocasión la hemos preparado con Remolacha cruda, que es la forma habitual de disfrutarla en India aunque os resulte extraño. No es tan dulce pero tiene un punto crunchy buenísimo. Además de la remolacha hemos incluido semillas de sésamo y mostaza tostadas, y hojas de cilantro.La receta de Anjun Anand, y acompaña a las mil maravillas este pan naan de coco que es sencillo y exquisitamente suave al paladar.
Vamos pues con las recetas:
INGREDIENTES:
Para el Pan Naan: (Para 9 panecillos)
- 330 gr. harina común tamizada.
- 2 gr. de levadura seca de panadería (media cucharadita)
- 40 gr. de azúcar.
- 4 gr. de sal (media cucharadita)
-125 ml de leche de coco tibia.
- 40 gr. ghee (o mantequilla derretida).
- 75 gr. yogurt griego a temperatura ambiente.
- 50 gr. coco rallado.
Para la Raita de remolacha:
- 1 remolacha cruda pequeña, pelada y cortada en cuadraditos pequeños (90 gr. aprox).
- 200 m de yogurt natural revuelto (50% griego/,50% natural).
- Sal al gusto.
- 1/2 Cucharadita de pimienta negra recién molida.
- 1 cucharadita de aceite de semillas.
- 1 cucharadita escasa de semillas de mostaza negras (en mi caso amarillas).
- 1 cucharadita colmada de semillas de sesamo.
- Hojas de curry o en mi caso cilantro.
PREPARACIÓN:
Comenzamos preparando el Pan Naan:
Mezclar en un cuenco la harina tamizada, la sal, la levadura seca y el azucar. Haz un hoyo en el centro e incorpora la leche de coco tibia, el yogurt y el ghee o mantequilla derretida.
Mezcla estos ingredientes con la mano y cuando formen una bola homogenea, pásala a la mesa y amasa durante unos 10 minutos.
Depositala en un bowl aceitado cubierto y déjala fermentar en un sitio cálido hasta que casi doble su volumen. Estos días hacía bastante frío, y la tuve que introducir en el microondas apagado con un bowl de agua hirviendo. Aun así y como incorpora mantequilla y grasa de la leche de coco, me llevó mas de 2 horas y media.
Precalentamos el horno a 230 ºC, calor arriba y abajo y con la piedra de horno en el interior.
Una vez fermentada pasamos la masa a la mesa, desgasificamos ligeramente y hacemos porciones de unos 60 gr. Dejamos relajarse las bolitas de masa unos 20 minutos cubiertas.
Damos forma ovalada a las bolas, aplanándolas y estirándolas de un grosor de unos 0,3-0,5 mm.
Cocemos sobre la piedra de horno 1 minuto aproximadamente por cada lado. Al dar la vuelta untamos con mantequilla derretida.
Sacamos y mantenemos cubiertas en un paño calientes hasta que vayamos a consumirlas, a ser posible al menos tibias.
Preparamos la Raita de Remolacha.
Pelamos y cortamos la remolacha en daditos y la añadimos al yogurt. Ojo sin mezclar demasiado para que no tinte todo el yogurt de rosa. Os sorprenderá daros cuenta que la remolacha fresca suelta menos jugo que una vez cocida. Los que seáis reacios a utilizar la remolacha cruda podéis usa remolacha cocida, pero muy bien escurrida.
En una sartén pequeña ponemos el aceite de girasol, y tostamos las semillas de mostaza. Cuando empiecen a saltar añadimos las semillas de sésamo y las hojas de cilantro o curry, si disponéis de ellas. Dejamos unos segundos mientras las semillas de sésamo oscurecen.
Añadimos la mezcla de semillas a nuestra raita y listo. Podemos servir directamente o enfriar previamente en la nevera. En este último caso la remolacha irá tiñendo de rosa intenso la preparación.
Servimos nuestro pan naan caliente acompañada de esta Raita para mojar. Un aperitivo fresco con un contraste de sabores realmente suaves para lo que es la gastronomía India.
A disfrutar.
VIRGINIA